Termino la espera y todo está listo para que la ciudad metropolitana de Caracas se llene del colorido, los canticos y la alegría del futbol venezolano en la próxima edición del torneo apertura 2011, nuevamente las gradas verdes y amarillas del olímpico volverán a llenarse del rojo, blanco y negro de nuestra pasión, los colores de la vida capitalina.
Una vez más volveremos a la cancha después de tanto tiempo a alentar al rojo de nuestros amores, al que queremos y llevamos en el corazón; todos vamos a brincar, a saltar y a dejar la vida en la tribuna; mientras somos testigos de cómo nuestros jugadores también la dejan en el terreno, para regalarnos la décima segunda estrella.
Nuevamente comenzaran a sonar los bombos, redoblantes y trompetas, se estremecerá los chaguaramos con la mezcla de gritos y fuegos artificiales al ritmo del Dale Ro cuando nuevamente veamos al endecacampeon salir del túnel, nuestros corazones latirán de la misma manera desenfrenada y sentiremos las cosquillas naturales en el estómago que sufrimos cuando estas por encontrarte con uno de los amores de tu vida.
Sonara el pitazo inicial y comenzara el carnaval, el carnaval que dura noventa minutos y mucho más, el carnaval que sigue al equipo y no pide nada, el que gane o pierda sigue apoyando. Comenzara a rodar el balón y no dejaremos de alentar con el corazón ni un solo minuto, se nos olvidara nombre, dirección, raza o color, solo seremos uno más del equipo, ese jugador número doce que solo quiere verte campeón, porque nos los pide el corazón.
Así que ya lo saben todos al estadio, nadie debe perderse la fiesta avileña, y por eso quiero ver a gente corriendo desde cada esquina para ver y alentar al Caracas FC, para unirse al carnaval rojo, blanco y negro de la hinchada que más que una pasión de noventa minutos y algo más, es un SENTIMIENTO POPULAR.
