jueves, 29 de abril de 2010

Un Clásico que se vistió de Fiesta.


La noche del 28 de abril de 2010 será recordada como la noche donde la fiesta del futbol caraqueña de vistió de gala, para recibir el Clásico del Futbol Nacional entre Lo Rojos del Ávila y el Carrusel aurinegro. Lo que se viviría en el olímpico seria un marco espectacular para jugar al futbol, desde tempranas horas del día ya se encontraban agotadas las localidades dispuestas para recibir a los fanáticos de ambas aficiones, el ambientazo momentos previos al encuentro en los alrededores del estadio se respiraba de un encuentro único de dos grandes clubes con una gran rivalidad, el colorido fuera del estadio daba a entender que al entrar lo que se verían los invitados a esta fiesta sería algo para no olvidarlo jamás.

Poco a poco se fue llenando el estadio, cubriéndose de rojo y amarillo las gradas del Olímpico plasmando el colorido que se apreciaba en principio a las afueras del estadio, La barra roja impresionante comenzaba a llenar de ánimo y espíritu a todos los fanáticos no pertenecientes a la misma, por su parte el gran grupo de representantes de la fanaticada aurinegra también hacia lo suyo, comenzando el enfrentamiento del clásico minutos antes de darse el pitazo inicial. Aumentaba el ambiente con el pasar de los minutos y se demostraba que el comportamiento de los asistentes sería para destacar, las medidas de seguridad, la logística empleada era muy efectiva y manejada de una manera inteligente.

Entraron los onces y estallo la fiesta, ambas barras desplegaron sus mejores actuaciones, fuegos artificiales, papelillos, rollos de papel, globos y un sinfín de cosas volaban sobre el cielo del olímpico para darle vistosidad al partido más importante para ambos clubes. El colorido era impresionante y abrumador que le ponía la piel de gallina al más pintado, en ese momento me preguntaba que pueden estar sintiendo esos veintidós guerreros, al ver lo que sus fanaticadas les tenían preparado para recibirlos en este espectáculo de noventa minutos que estaban por darnos.

Comenzó el partido y ambos clubes comenzaron a proponer, era un juego de ida y vuelta con ocasiones de lado y lado pero con poca efectividad de cara al arco, pasaron los minutos y seguía la tónica de manejo de balón por parte de los rojos y pierna fuerte en el medio campo por parte de los aurinegros, esperando contraatacar el arco de Renny Vega. De esta marera continuo el parido aun después del medio tiempo. Hasta que apareció el talismán rojo, el muchachito que se la tiene jurada al Táchira, si él, ese mismo Cesar “El Peluche” González; y hay que decir que si a esta joven promesa le faltaba alguna materia para graduarse de crack; La noche de ayer la presento y la paso con la mejor nota, bastándole solo un minuto en la cancha para decidir el futuro del encuentro, sumarle tres puntos en la tabla al Caracas FC y mandar a callar a los asistentes de la curva norte del Olímpico que seguramente vivieron un Deja vu de aquella tarde del 15 de marzo de 2008, donde en ese mismo arco el jovencito se estrenaba con el caracas, marcando lo que a mi parecer es el Gol más espectacular que he visto en el futbol nacional. 

Pasaban los minutos finales del encuentro, y Táchira buscaba el empate con más ganas que orden, pero salió a relucir la figura del portero rojo y seleccionado nacional, tapando varias y entre ellas un tiro libre de Javier Villafraz con bastante veneno que buscaba colarse en el fondo de la red. Se dieron los tres pitazos,  Había ganado El Rojo y celebraron con su gente estando en lo más alto de la tabla  nuevamente, dando un gran paso a ganar el clausura y a disputar la final del torneo contra los rivales que acababan de vencer.

Debemos colocar en negritas y subrayar el comportamiento de los asistentes al encuentro, la actuación de los cuerpos de seguridad y sobre todo la logística implementada por la organización del Caracas FC para el perfecto disfrute de esta pasión de noventa minutos y algo mas…!!!